La fotodepilación IPL es un sistema de eliminación progresiva del pelo utilizando para ello un rayo luminoso que es emitido por un equipo de luz pulsada intensa (IPL).
El disparo de luz (con una longitud de onda definida: 610-1200 mm y con intensidad ajustable) es absorbido selectivamente por los folículos pilosos que están situados por debajo de la superficie de la piel.
Este sistema se basa en el principio de fototermolisis selectiva: la luz (foto) es transformada en calor (termo), y destruye (lisis) las células germinativas del folículo piloso de forma selectiva, mediante la absorción de la misma por parte de la melanina.
De esta forma, la melanina absorbe la luz y conduce esta al folículo piloso, donde transformada en calor, quema las células germinativas, provocando la destrucción del bulbo piloso, sin dañar el tejido circundante.